Una conocida canción dice algo así como, "sigamos al líder, a la izquierda, a la derecha" y en definitiva es precisamente eso lo que hacemos cuando un verdadero líder asume un proyecto. Pero que pasa cuando ese "líder" no identifica en cuales circunstancias debe usar su mano derecha o su mano izquierda. Yo te lo voy a decir, lo que sucede es que estamos ante un liderazgo mal canalizado. En un Evento por ejemplo, encontramos liderazgo compartido en cada una de las etapas y de no estar bien canalizado puede convertirse en una verdadera pesadilla para los resultados.
Recientemente tuve la oportunidad de compartir con los que yo he denominado líderes de parcelas, es decir aquellos que pueden llevar adelante un equipo y a la vez son capaces de sabotear el proyecto global del cual forma parte dicho grupo de trabajo, de allí la importancia de canalizar la fuerza de la mano derecha de algunos miembros en el equipo con talento para sumar pero que se dedican a restar.
Para hacer que ese líder sume, una de las opciones es involucrarlo, hacerlo responsable, hacerlo parte de la solución. Entregarle herramientas para negociar y hacer uso de su mano izquierda con más frecuencia harán de ésta persona el aliado perfecto. En los Eventos, al igual que en una orquesta sinfónica el Director lleva la batuta pero cada músico, cada intérprete es un líder en lo que hace, es la guía perfecta para completar una gran obra, de la misma forma se incorporan cada uno de los entes que conforman un Evento, en donde la mano izquierda de ese líder con el personal y la derecha con los proveedores, durante el cumplimiento de su gestión, engranan perfectamente para alcanzar un resultado brillante.
Así que la próxima vez que te toque montar un Evento, recuerda que tienes dos manos y de acuerdo a la gestión de turno puedes usarlas para alcanzar los objetivos planteados.
Hasta aquí por hoy, nos vemos en una próxima oportunidad. Recuerda que puedes seguirme en mis Redes Sociales Twitter: @70fmr / Facebook: Territorio Marketing, ciao Marketero!!!
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